NO NOS QUEREMOS ENTERAR.

            Dicen que uno se muere cuando se para el corazón, otros cuando en el encefalograma sale una línea plana.  El corazón de nuestro valle, que fue la minería, hace  años que no late y esa línea plana cuenta ya con kilómetros de recorrido, y no nos queremos enterar, o si nos hemos enterado es que disimulamos muy bien.

Es curioso lo que pasa; nadie sabe nada, nadie se entera de nada, nadie hace nada, a nadie le preocupa nada, a no ser salvar su propio culo. Preguntas a alguien si ha estado apoyando la concentración contra los recortes en Educación delante del Ayuntamiento el día 19 de septiembre y te dicen que es que no se habían enterado, si no si hubieran ido, que como no les va a preocupar la educación de sus hijos, faltaría más Preguntas si fueron a la manifestación y concentración en Madrid el 15S contra los recortes y exigiendo un Referéndum para poder votar si queremos o no que nos sigan machacando de esta manera, y es que tampoco se habían enterado. Que raro que solo se enteraran los 18 que asistieron desde Laciana y más raro aun que entre estos solamente tres trabajadores en activo, uno de educación y dos de minería, todos de CC.OO. , raro también que no se halla enterado ningún sindicalista de los demás sindicatos y más raro aún que ningún político. Solidaridad se le llama a eso, que es la misma que la que tienen los mineros de interior con sus compañeros de las contratas y de los cielos abiertos, vergüenza debería de darles algunos, si es que la tuviesen, el tener que ir a denunciar a sus propios compañeros y encima tener que ir arropados por los antidisturbios a trabajar. Miserables, esquiroles y vendidos es lo que son.

Y total, para que nos vamos a mover, pensarán algunos, si no nos van a hacer ni puñetero caso, y los que nos gobiernan pues más de lo mismo, que otra nueva vuelta de tuerca, total ni se enteran y si se enteran como que no se quieren enterar, por que no se mueven. Habría que tomar buena nota de lo que ha pasado en Portugal y lo logrado por los ciudadanos con sus manifestaciones durante más de quince dias, ni más ni menos que obligar al gobierno a dar marcha atrás en su intención de volver a subir los impuestos que gravan a los trabajadores y pensionistas fundamentalmente.

Alguien me decía que en estos casos había que salir con megafonía por los pueblos, que la gente no lee la prensa ni oye la radio, vamos que no se quieren enterar digo yo. Que hay que volver a tiempos pretéritos, como aquellos que recuerdo de los pescaderos Pío y Sara que venían de Cudillero una vez a la semana a repartir la mercancia por Villaseca y ponían por los altavoces la canción de “ La estudiantina” para que las mujeres se enterasen de que ya estaban allí.

Y digo que no se quieren enterar, porque el equipo desgobierno que nos gobierna ni se entera que existe la oposición, ni la oposición se entera que existe un equipo de gobierno que más bien nos desgobierna, y nos despista cambiando el sentido de la circulación, o el mercadillo o lo que se le ocurra, o sea que ni tenemos gobierno ni oposición. Y que este malgobierno no se quiere enterar que tiene que pagarles los cuatrocientos mil euros de atrasos  que debe a los trabajadores  del año 2.007, que por eso tiene 43 demandas en el Juzgado Y que lo que no vale es que ahora les quieran descontar de esa cantidad los tres días de huelga que les pagaron por cerrar el ayuntamiento en apoyo a los mineros, ni tampoco detraer los moscosos que disfrutaron, que Santa Rita Rita lo que se da no se quita.

Y así va transcurriendo el tiempo por estos valles moribundos. Entre los nos se y no me quiero enterar algunos nos recuerdan, camino al centro Sociosanitario, que esto ya es poco menos que un cementerio; con sus cruces recordándonos que hay que “enterrar” a quien gobierna y a sus ministros, y de paso han colocado a “ la de la guadaña” vestida de negro para que vayamos viendo el futuro que nos deparan políticos como el “platanero” Soria es decir nada de becas, ni de cursos, ni de obras, ni de nuevos empleos, ni de paradores, ni Cristo que lo fundó. Total que “ pa qué”, si ya casi estamos muertos.

SALUD Y REPUBLICA.