LA MARCHA NEGRA. ( VILLABLINO-MADRID ) 1.992

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20 años se cumplen hoy de la salida de la llamada Marcha Negra, desde Laciana con destino al Ministerio de Industria, en el paseo de la Castellana de la capital del Reino. El objetivo era hacerse oir ante la Administración gobernada por el PSOE y dar solución al problema de la regulación de empleo, el cierre de pozos y la práctica liquidación de la MSP, principal empresa del Valle ( hoy desaparecida) a causa de las ingentes deudas que venia acumulando años atrás y los fallidos planes de Viabilidad ante el incumplimiento de las Administraciones a la hora desembolsar las ayudas pactadas.

Una Marcha, que se gestó y se preparó desde CC.OO. como alternativa a los conflictos que iban derivando en enfrentamientos radicales contra la Guardia Civil. Que se traducían en cortes de carreteras y autopistas con heridos y detenciones , sin servir para sacar nuestro problema del ámbito local y provincial.

Marcha que también sirvió para concienciar a todo un pueblo de que tenía que luchar por sus derechos, que todos individuos son importantes,  que todas las fuerzas son necesarias, y que no se puede rendir uno ante las adversidades por muy negativas que estas parezcan. Un ejemplo de lucha que quedaría para la historia del movimiento obrero de este país.

Para hacernos una idea de cómo sucedieron los hechos, desde dentro, y sin entrar en polémicas de tipo sindical o político , me limitaré a reproducir como un homenaje a todo aquella gente que participó en las movilizaciones, el diario de uno de los participantes.

Dia 8 de Marzo. Primera etapa.

Villablino-Toreno, 42 Km.

Salimos de Villablino, delante del Ayuntamiento y Sindicatos, a las ocho y veinte de la madrugada 467 compañeros de la Minero Siderúrgica de Ponferrada con destino a Madrid. Descansamos a las doce del mediodía durante diez minutos, y a las dos menos cuarto llegamos al Escobio donde comimos el bocadillo que llevábamos de casa. A las seis menos cuarto de la tarde y entrando en Toreno concluimos el primer día de marcha.

Fuimos recibidos en los distintos pueblos por los que íbamos pasando por multitud de gente, que emocionada nos daba ánimos para continuar. Las lágrimas se veían correr por las mejillas. En estos momentos, mientras tomo notas en una diminuta agenda telefónica, todos los que participamos en la Marcha nos encontramos juntos cenando en el restaurante Villar. Salomé es la encargada de facilitarnos la cena que consiste en una sopa como primer plato, estofado de ternera de segundo, pan, vino, postre y café.

La nota predominante durante la jornada ha sido el  buen trato que recibimos por parte de todo el mundo: prensa, radio, televisión. El humor entre todos los marchantes fue algo destacable, yo concretamente me reí mucho y, aunque tuve momentos muy duros. Ví el corazón de la gente que nos recibía y apoyaba en todos los lugares. Pero lo más importante de esta primera jornada fue la visita de mi mujer y mi hijo al llegar a Toreno, esto me quito todos los sufrimientos.

Acaba de llegar un cura con una donación de 532.000. pesetas para la Marcha, la Cruz Roja con 59.000. y en Matarrosa donaron 350.000. Esto lo dice todo.

Son las diez de la noche y ya estamos en el saco. A mi izquierda tengo a “Gelo” y a mi derecha a Juan. Espero descansar, pero no pego ojo en toda la noche. Estamos en el pabellón deportivo y la tónica predominante son los masajes y las cojeras, el olor a pomadas lo impregna todo el ambiente. Yo creo que si no fuese por el afecto y apoyo que recibimos muchos compañeros se hubiesen ido para casa.

En el Escobio ví como algunos compañeros se abrían las ampollas de los pies con una navaja y cada vez que los veía sangrar un escalofrío recorría mi cuerpo.