POLÍTICA, VOCACIÓN Y CARADURAS

El ejercicio práctico de la política es (o debiera ser) el resultante de una vocación de servicio público. Gente, como usted o como yo, que se siente útil y capaz de trabajar por el bien común de sus conciudadanos. Y se pone a ello. No por el afán de ganar dinero, sino de servir a la comunidad de la que forma parte. Al menos en la teoría. En la práctica, la cosa cambia mucho. Porque no todo el mundo da el salto a la política para servir a la ciudadanía sino más bien para servirse de ella, que es bien distinto.
De entrada el ser mortal que un buen día llena dos mil quinientos sobres electorales y su partido lo pone el número tres en las listas al ayuntamiento, considera que da un salto de calidad tal que, cuando se dirige a sus vecinos los llama “ciudadanos”, en lugar de “conciudadanos” pues él, ese voluntarioso llena sobres, no deja de ser otro ciudadano más sólo que inconscientemente, o no, se aparta del vulgo para estar un escalón por encima.
Eso ya da una idea de cómo se concibe el ejercicio de la política por parte de la inmensa mayoría de los que se dedican a ella. Pero volviendo al asunto en cuestión: lo de las vocaciones y tal. La remuneración por dedicación exclusiva (liberación, también se llama, pues les libera en verdad de los agobios económicos de la media ciudadana) está hoy a la orden del día en las corporaciones. Y no digo  que quien ostente altas responsabilidades no deba ser atendido en función de ellas, pero hay matices.
Uno de esos matices lo encontramos en esos concejales de pueblo, sin mayores competencias que las justas, que suelen ser poquitas. Ediles que, sin embargo, se embolsillan tranquilamente dos mil euros mensuales. La vocación, por tanto, se mide en billetes de quinientos. No se pretende que quien se dedica a servir a sus semejantes, a resolverles sus problemas, pierda dinero por ello. Naturalmente que no. Pero que tampoco nos tomen el pelo.                                                                                                                                                          
Hay casos de esos concejales o alcaldes que se llevan esa pasta o más  al mes, pero que además tienen, negocios distintos que les rentan a base de bien. Por consiguiente, si ya tienen otros sueldos en la vida “civil” y encima sus ayuntamientos los liberan con dos o tres mil euros al mes, ¿han venido a la política a algo distinto a enriquecerte con descaro? ¿harían el mismo trabajo a cambio de cobrar sólo los gastos de gasolina y teléfono? Esto último sería el verdadero ejemplo de vocación. Lo contrario es un ejercicio de caradura sin límites.

El verdadero problema más allá de este asunto puntual, es el divorcio que existe entre la clase política y los ciudadanos, que reflejan perfectamente todas las encuestas. No es ninguna tontería que los políticos se hayan convertido en un problema en vez de una solución, ni tampoco que lo que antes era un mérito: dedicarse a la cosa pública se haya convertido ahora en un demérito y algo a despreciar.  Existen  auténticos problemas para completarlas las candidaturas, algunos incluso han ido puerta a puerta para conseguirlo, fundamentalmente por el qué dirán. Salvo los políticos profesionales, que han hecho de ello su forma de vida y sustento, encontrar personas de la sociedad civil, ciudadanos independientes que quieran vincularse a las siglas de un partido para hacer un servicio a su comunidad, es casi misión imposible. Los abusos, la corrupción, la miseria partidista, los enfrentamientos gratuitos y la falta de grandeza democrática hacen que el ambiente sea espeso, cada vez más irrespirable, debilita la democracia y es el caldo de cultivo ideal para que aparezcan iluminados de todo tipo y condición. 

Uno de estos especímenes de políticos profesionales es la actual alcaldesa-senadora pesoebrista de Villablino, que ha pasado de simple profesora a convertirse en una Madrepatria y  embolsarse casi un millón de las antiguas pesetas mensuales: Conocida principalmente por azañas tales como: Vender al mayor empresario de la comarca cinco cielos abiertos a cambio de la antigua térmica de Ponferrada para que su amiguete ZP construya la ciudad-museo de la energía y meta a currar en él a la tropa de su cuerda; dejar que don Vito sentase sus posaderas en el sillón de la alcaldía ( lo que ya es bastante significativo); cepillarse toda la ejecutiva por oponerse a su acuerdo con el empresario; votar en el senado a favor de la congelación de las pensiones, de la subida del IVA y de la bajada de salarios de los trabajadores- funcionarios de la administración pública; no cumplir ni el diez por ciento de su famoso programa electoral, aquel “ HAREMOS MÁS”; etc…etc…etc… para no aburrir al personal. La consagración le llega cuando sacando su vena fascistoide desaloja mediante la Guardia Civil al personal asistente a un pleno un 18 de Julio.

 Tiene la cara tan dura que incluso pide la intervención del Tribunal de Cuentas para que fiscalice la etapa de gobierno de IU, olvidándose de los dos años de su malgobierno anteriores a la moción de censura, lo malo para ella es que no se haya encontrado ninguna acción punible o delito que pudiese meter en la cárcel al Alcalde más honrado que hayamos tenido el Valle. La senadora llorona, ahora en plena campaña, recuerda que el ayuntamiento al que accedió tenía deudas,  todo ello después de dar la vara meses y meses en los medios de comunicación, quizás el vuelo tan alto le haya desmemoriado, “pobrecilla”

A la Señora Alcaldesa-senadora, por si la memoria le falla, habrá que recordarle que casi la mitad de esa deuda la tiene que poner en el “debe” de su partido; que usted se comprometió públicamente a solucionar el problema y la ha aumentado; que el ayuntamiento de Villablino es el quinto de la provincia y su volumen de deuda también figura en quinta posición; que de los cuatro restantes, tres los gobierna su partido ( León, San Andrés y Astorga); que su amigo exalcalde de San Andrés y hoy Director de Paradores acuñó la ya celebre frase de” hay que hacer lo que se deba aunque se deba lo que se haga”. Que en el Valle nunca se hizo tanta obra en tan poco tiempo y si no fuese hipotecándose no se hubiese hecho absolutamente nada, porque ni su gobierno ni el del PP han apostado nunca por Laciana; que se ha aumentado sustancialmente el patrimonio municipal y solo con que se llegase a un acuerdo de venta del Centro Sociosanitario con la Junta de Castilla y León, la susodicha y tan cacareada deuda quedaría a Cero patatero ó zapatero, me da igual; que más de quinientos ayuntamientos de menos de diez mil habitantes después de las elecciones tendrán problemas por no poder pagar las nóminas ni la luz; que si su amiguete del alma Don Victorino en vez de pagar los impuestos de vehículos en San Andrés lo hiciese aquí, que es por donde circula y nos deja la “mierda”, en estas dos últimas legislaturas hubiese recaudado más de tres millones de euros para el municipio, pero claro “como son amigos” que más da, si todo queda en casa del P$o€.

Para ir acabando solo plasmar alguno de los epítetos que le dedican los ecoloverdosos en su web, sí esos que dicen que nunca insultan: demagoga grotesca y repugnante, mentirosa, careto retocado con el fotoshop, irresponsable, ambiciosa, trapacera, autoritaria, chapucera, patética, cínica……. ¿ alguien da más?

Que nada, que no me extiendo más por hoy, que es una caradura empedernida, y lo sabe…..y lo sabemos.