lunes, 22 de agosto de 2011

Porqué no hay una revolución en España


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Según los datos, en España hay cerca de 5 millones de parados. ¿Por qué no hay una revolución? La pregunta se la hacen dentro y fuera, sobre todo los que manejan los famosos mercados, pero resuena cada vez más en el mundo académico, sindical y político dentro de España. La huelga general, las protestas contra la reforma de las pensiones, el recorte de los salarios, nada parece suficiente para movilizar al español.  ¿Por qué?
El miedo a perder el Estado del bienestar atenaza a los ciudadanos. El miedo desincentiva. Precisamente no hay una revolución social porque hay casi cinco millones de parados. La paradoja es que cuando las cosas están mal, están mal incluso para protestar. El miedo desincentiva, no justifica, pero explica la atonía en las relaciones laborales. El miedo a significarse en un momento de fragilidad del mercado de trabajo puede paralizar a una parte de la sociedad, sobre todo a los que tienen contratos en precario y a los inmigrantes.
Hay una percepción de que las cosas son como son y no pueden ser de otra manera. Es algo como de las leyes de la naturaleza. Han convertido a los mercados en una fuerza trascendente y en esto los españoles somos un caso perdido.
La izquierda no se moviliza porque teme el relevo del Gobierno de Zapatero, piensan que las cosas no van a cambiar por ejercer el derecho a manifestarse, esa es una sensación muy extendida entre los que han perdido el puesto de trabajo. Algunos dicen que lo tiene claro. "No me van a hacer caso. De acuerdo que tengo el derecho al pataleo pero para qué", explican tajantes, a la vez que reconocen su enfado por la situación que están viviendo y por las políticas que ha emprendido el Gobierno, que en su caso no están resultando efectivas.

Hay quien se asombra ante la actual falta de crédito de los ciudadanos hacia las instituciones. Nunca han visto una situación como la de ahora en términos de pérdida de confianza. Los ciudadanos ya no creen en los sindicatos ni en los partidos políticos. Está claro que creen que no les resuelven sus problemas. Ven que en otros países que han sido más beligerantes, como Francia o Grecia, los gobiernos no les han hecho ni caso y creen que las manifestaciones ya no son un arma política , y este pragmatismo es lo primero que deja a la gente en casa , además de no saber contra quien dirigirlo ni  focalizarlo. Muchos, en estas últimas elecciones, han volcado  su enfado contra Zapatero y contra el PSOE y contra los sindicatos mayoritarios, incluso sabiendo que lo que puede venir luego será peor.

Que la crisis económica haya azotado a un Ejecutivo de color socialista también ha desempeñado su papel a la hora de desmovilizar a la ciudadanía. La mayoría de los expertos perciben ese temor de la izquierda a manifestarse, porque presagian que lo que les sustituya puede ser horribilis.
Lo que parece una parálisis en la movilización de la izquierda, que no le gusta lo que tiene pero vive aterrada con lo que puede venir, se mezcla con la nueva composición de la sociedad moderna que mezcla unos ingredientes hasta ahora poco saboreados: individualismo, despersonalización, falta de identidad de clase, consumismo... Es el paso de la sociedad productiva, del trabajo, a la del consumo. Del nosotros, al yo.
 Desde 1936 no hay clases sociales, hay enemigos políticos,  la clasificación de obreros y patrones se ha difuminado, pasando a la dicotomía izquierda o derecha. De aquel pasado al presente más rabioso, el foco principal de la sociedad ya no está en el trabajo, está en el consumo, y esto es aún más palpable entre los jóvenes. En la época de crecimiento, abandonaron los estudios y accedieron a empleos sin cualificación. Por ello no han articulado sus identidades alrededor del mundo del trabajo, la precariedad y la rotación les han hecho desconectar del mundo sindical",
Se ha roto la homogeneidad del mundo del trabajo que tendía a la unidad como un derecho general. Un todo genérico que unificaba la sociedad. Desde los ochenta, existe una fuerte fragmentación de las relaciones laborales porque hay situaciones muy heterogéneas. Es un todos contra todos.
Para el ciudadano de a pie, la reflexión es más sencilla. "No voy a las manifestaciones porque no creo en los sindicatos, no me representan", dicen algunos. Pero más allá de la falta de simpatía sindical, lo que sucede es que los jóvenes no tienen una conexión sólida entre su identidad y el puesto de trabajo, lo que les ha llevado a individualizar los problemas. No tienen identidad de clase".
Muchos no han entendido que la estrategia de los sindicatos mayoritarios de presión-negociación en la actual coyuntura es más efectiva que la que han llevado a cabo los sindicatos franceses y griegos, que tras más de media docena de convocatorias de huelgas generales no han servido para nada, y aún así esperan que estos les resuelvan todos sus problemas sentados ante las pantallas del televisor.
Los más jóvenes suman al problema de escasa educación política, la comodidad de contar con la red familiar. Casi 900.000 parados uno de cada seis es menor de 25 años, una franja de edad que en España se asume como un periodo natural dentro del hogar familiar. La juventud absorbe parte del dolor mediante el apoyo de las familias. La familiarización de la sociedad actúa como apoyo a sectores de la población que están sufriendo enormemente las políticas que se desarrollan.
Los elementos de protección social sirven como diques de contención. Un porcentaje muy elevado de desempleados todavía recibe el seguro de desempleo o la ayuda de los 400 euros, lo cual actúa como un cojín. La situación se va a convertir en más tensa cuando esta ayuda se reduzca o desaparezca. Por otra parte el empleo sumergido también se utiliza como parapeto del descontento social.
Es un tópico sociológico que las sociedades organizadas estatalmente, las sociedades salariales occidentales, empiezan a desestabilizarse a partir de un 10% de desempleo, situación que tiende inexorablemente a empeorar, señalándose el 20% de desempleo como un punto de inflexión que aboca al conflicto social más o menos abierto. Es muy importante conocer por qué en España ese conflicto abierto no se ha producido porque saberlo permitiría explicar la naturaleza de esta sociedad, el modo en que se ejerce el poder político, la manera en que se reparten las rentas y, sobre todo, por qué la gente tiene miedo, de qué tiene miedo, por qué la sumisión es patente y generalizada.
Cuarenta años de represión enseñaron minuciosamente a tener miedo y la llamada Transición mantuvo calientes aquellas ascuas. De suyo el pasaje transicional fue presidido por el miedo a que se repitiera lo que dio lugar al golpe de estado del 36, chantaje es otro modo de denominar lo que entonces y ahora imperó y sigue. La población española fue aleccionada acerca de que era necesario ser sumisos para no despertar los viejos fantasmas familiares. Los partidos políticos gestionaron a su interés la desmovilización nacional, la exclusión ciudadana del juego político.
La existencia de clases sociales no es una cuestión solo material sino un modo de percibir la compartimentación social, la toma de conciencia de pertenencia a una clase social. Esa conciencia de clase ha sido históricamente demasiado peligrosa para la organización social bajo las condiciones capitalistas y de forma más premeditada que espontánea el neoliberalismo fue minando la vieja cultura obrera, desactivando las condiciones que la hicieron posible. Cercanos a unas elecciones  es cosa de no prestar confianza a los que atemorizan sin buscar el modo de acabar con el miedo, a los que han cortado las alas a la democracia popular y la han sustituido por una oligarquía de partidos.

Este régimen controla totalmente nuestras vidas, nuestros pensamientos, nos han convertido en "adultos infantiloides" nuestra responsabilidad empieza y acaba en un urna. Luego ya no tenemos ninguna "responsabilidad" la culpa ya es de los políticos, de los sindicatos, de los medios de comunicación, es decir de "cualquiera que pasa por ahí"  Vivimos bajo la tutela del estado como eternos menores de edad, como si fuésemos gilipollas.
 El pensamiento único hoy es pensar que no hay otra alternativa a esta democracia totalitaria
Si nadie trabaja por ti que nadie decida por ti.



12 comentarios:

  1. Entonces, siguiendo con el argumento del artículo, por favor, que alguien me explique por qué alguien que no hizo NADA en la anterior legislatura vuelve a ganar las elecciones en Villablino. ¿Por miedo? Pero, ¿miedo a qué? Si es que nunca hubo alcalde peor. Quizas sea el miedo a que alguien pueda hacerlo mejor y mejoremos nuestra situación que ahora, sin minería en la comarca, es el caos total. Quizás el Ponfeblino remedie el problema del desempleo en la comarca. ¡¡No, va a ser el parador!!!

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  2. Joder, menudas peroratas metes fogonero, me recuerdas al Cansino Historico de José Mota.
    Igual que estos "indignaos" de pacotilla que tienen los santos huevos de venir a decirnos que tenemos que reconvertirnos en "vaqueiros de alzada", que se "vaqueiricen" ellos y su p. m.

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  3. Seguro que a la p.m. de alguno no le hace falta reconvertirse, ya lo es desde hace tiempo. Los del 15 M alzan la voz por el incumplimiento de la LEY, eso que a tí se te queda grande, eso que hay que ENTENDER para poder leer.

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  4. jajajaja, no me puedo creer, que sorpresa, el comunicado de los Sindicatos, de todos los sindicatos.
    Alguien dudaba que saldrían a defender a..............

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  5. Si, ultimo anónimo, a defender el trabajo de sus compañeros, mal que te pese. Y defender a sus compañeros no creo que signifique defender al empresario. La función de los sindicatos no es entrar en política eso ya los haceis otros bastante bien.
    Si los que toman la montaña están contra el carbón porque , segun dicen, contamina mucho y el de aqui es de muy mala calidad, ¿por que no se ponen a cortar los camiones de carbón que viene de fuera para la termica de Cubillos?.
    ¿ Porque han acampado en Sosas y concretamente en una finca del que fué alcalde pedaneo de los Verdes? ¿ Porqué no acampan al lado de un cielo abierto?
    Demos de manipular al personal, que lo que vienen a decir, hace mucho tiempo que mucha gente los esta diciendo en Laciana. Haber si va a ser que los que aqui llevamos desde que nacimos ahora nos enteramos de lo que pasa, o es que nos tratan como a borregos?

    PedroX

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  6. Y yo pregunto; por si hay alguien que me pueda responder, y....¿porqué no hay una revolución ciudadana en Laciana con la que nos está cayendo desde hace años?

    FlorDeLis

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  7. Flor de lis. Quiza porque es mucho mas facil manifestarse con el apoyo de vitorino(promesas de trabajo, permisos, prejubilaciones) que en contra de sus intereses(ilegalidad de los cielos abiertos,cierre de todos los pozos,fraude con las subvenciones).
    Lo verdaderamente penoso es que llevamos 20años de reconversion con miles de millones de euros de dinero publico gastados en laciana y lo unico que tenemos son:
    2000 prejubilados.
    Minas cerradas
    80 empleos alternatvos
    Un desastre medioambiental
    y perdido el espiritu revindicativo

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  8. Flor de lis. ¿ a q tú no estas entre los 2000?. Pues ya sabes a rabiar hasta los 67 años. ¿ tú estas de acuerdo en q vengan unos tip@s a un valle q por puta desgracia aún depende del sector del carbón (" hojala tuvieramos la seat, o algo parecido") a decir que el carbón es contaminante?. Si estas de acuerdo pero con boca pequeña porque no vas a tener los santos cojo... de ir a exponer tus ideas en las asambleas q el movimiento va a celebrar por Laciana. Ni tú, ni los chicos de filón verde, y mucho menos el frances de Ecolo, que según comentaban hoy en un bar de caboalles hasta el ecolo que dejó el prao para la acampada se ha ido de vacaciones.

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  9. No estoy de acuerdo con eso de que en laciana se han gastado miles de millones de euros de dinero público, eso es una exageración, como otras muchas que se vierten. Lo que si es es penoso es que llevamos 13 años de reconversión sin crear ningún puesto alternativo, ni ningun tipo de tejido industrial, y encima sin movilizarnos y mirando para los cielos haber si llueve maná.
    Y para este último anónimo curioso, Sí estoy entre los dos mil que dices, y estoy a favor del carbón, pero tambien entiendo lo que plantean los del 15M, por que el carbón funciona con ayudas públicas, tambien de sus impuestos. El que se debería de aclarar eres tú.
    Tambien entiendo que los sindicatos defiendan el único empleo que existe en la zona, aunque Vitorino se siga enriqueciendo. Sino que los gobiernos estos de mierda creen empleo y se dejen de llevar la pasta para otro sitios donde no existe ni asomo de minería.

    FlorDeLis

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  10. Jotaele se pregunta porque no hay una revolucion en España y en los comentarios la pregunta es mas cercana, porque no hay una revolucion en Laciana.
    Yo modestamente creo que la repuesta es muy clara tanto en España como en Laciana hay un gobierno de izquierdas, que son los que de verdad saben lo que necesita la sociedad, los que se ocupan del trabajador etc.etec. y como resulta que de eso nada pues no se protesta porque eso va en contra de nuestro sentir de siempre.
    A mi me encantaria saber que pasaria en España si con la que esta cayendo hubiera un gobierno del pp e incluso un alcalde del pp en Villablino,no tengo dudas la revolucion estaba servida.

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  11. Flor de lis.
    Solo en prejubilaciones 2000*30000euros*20años=1.200.000.000
    ayudas funcionamiento 20años*150millones=3.000.000.000
    Inversiones. Carreteras, poligono,hospital,sierra,etc

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  12. Porque somos paletos, egoístas...y acojonaos con la herencia del franquismo

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