EN ESTE VALLE DE DIOS .

La realidad cercana  es que la cola del paro va muy despacito, con cientos de  personas preparadas y formadas, o no, que no tienen hueco, se hunde el barco y no hay  botes para todos. A joderse. Siempre queda volver a Alemania como el tío Pepe, con la maleta de cartón, o quedarse en este valle de dios con poco más que la contraseña para el blog en el que vomitar las horas inertes, o las que vendrán, explotado merced al endosado por el recto de la reforma laboral que permite a los currantes rotar y rotar en base a nuestra necesidad de comer y a los dueños de las empresas seguir amontonando mercedes y porches en el garaje. Viciosas garrapatas somos. (A los pequeños  empresarios y autónomos los meto en el saco de los currantes puesto que tienen su misma capacidad de influencia social y poder, es decir cero patatero).

La realidad cercana y tangible en este valle de dios se impone a golpe de multa de la policía local y de la guardia incivil; en las inexistentes grúas de obra, antaño  guadañas sobre nuestras cuentas corrientes que poblaban algunos retazos de este cielo indiferente; en sus cicatrices de aceras levantadas y explotaciones a cielo abierto; en las frases de los políticos de la otra orilla , en el color negro de los plenos municipales; en los pijos que conducen el coche de papá o el que les han regalado, y cuando se paran a mi lado  miran primero la carrocería de los 90 de mi vehículo y después mi cara, siendo la suya bastante expresiva de que no les gustamos ni mi coche ni yo. Este bendito lugar se siente cercado en ocasiones cuando sufre alcantarillas llenas de tiempo que ya no tragan agua; "la música  hortera contaminando el ambiente", la tendera desquiciada que  vende el pan y siempre oye la Cope por que la SER ni se está ni se le espera; las ambulancias que recorren el pueblo como rayos, y las procesiones de borrachos con o sin trabajo haciendo una movida de zombies durante todo el día por los pueblos.

En estos pueblos de dios, hay curas, monjas, matoncillos, proletarios policias municipales, guardias civiles, contaminadores, ignorantes, mentirosos, burgueses, ladrones, caciques, mentecatos, corruptos, prevaricadores, mezquinos, capos, dementes,, un alcaldesa-senadora de infausta memoria, una bandera ondeaalviento rojigualda , una fábrica  de parados de importantes dimensiones, "constructores falangistas", colegios de futuros ociosos, cementerios, un hospital con quirófano donde no se opera de nada, unas 60 calles con nombres raros, una iglesia en San Miguel con la cruz a los caidos por la Patria, católicos/as, apostólicos/as y romanos/as,  y " un porrón de bares y pubs por cada librería”………………………………………………………                                           

En este valle de dios, la gente reza, está en los eres o en el paro, se ladra, maldice, odia, sangra, es explotada, nadie ayuda a las viejas a cruzar la calle, nadie cede el paso, nadie oye los gritos de horror de sus vecinos, todo dios pasa de todo esperando que les resuelvan sus problemas, "nadie quiere conocer a nadie" y "nadie hablará de nosotros cuando hayamos muerto".